Y a pasa que en una conversación nocturna se juntan dos frases, y al sacarlas de su contexto ocurre esto: "Nunca el tiempo es perdido... pero muchas veces el tiempo no pasa ni a ser recuerdo"
Ya va siendo hora
de escribirle
versos al tiempo,
de llenar los
huecos vacíos
y dibujar sonrisas
al viento;
de encontrarlo
perdido.
Y se queda quieto,
muchas veces no
pasa,
se queda parado,
muerto.
Muchas veces no pasa
Muchas veces no pasa
ni a ser recuerdo.
Ni a ser recuerdo,
Ni a ser recuerdo,
ni a ser olvido,
ni a ser pasado.
Aquí está, congelado
Aquí está, congelado
tiritando en el
camino.
Y aquí te
encuentro
¿estás perdido,
pequeño?
Sígueme, ven
conmigo,
te mostraré el
futuro
segundo a segundo.
Te encontré un
día,
y hoy seguimos
juntos
y te pierdo entre
versos
y se escapa mi
vida
entre tus
argumentos.
Siempre te tuve,
y fuiste caprichoso, engreído
y fuiste caprichoso, engreído
irreverente,
maleducado
y yo desagradecido;
porque siempre te
tuve.
Y ahora, te
conozco
y ahora, te
utilizo
y te comparto con
otros.
Y esta noche silenciosa
Y esta noche silenciosa
unos versos te dedico.